NEUQUEN: Patotearon y desfiguraron a un hombre con retraso
Como todos los días, el domingo pasado, Juan Marcelo Garrido, que padece de un retraso madurativo, salió a caminar por la plaza Soldado Ávila en Centenario. En el camino tuvo un entredicho con una joven, cinco hombres salieron a su encuentro y le dieron una feroz golpiza. Lo patearon hasta partirle la cabeza y luego se fueron. El padre de la víctima exige justicia.
“¿Qué mirás, gordo de mierda?”, le dijo una joven ante la mirada de Juan, que tiene 36 años y dificultad para expresarse con claridad. Ante esta recriminación, Juan le contestó que no la estaba mirando y comenzaron a discutir. En ese momento, la chica llamó por teléfono a su marido y a los pocos minutos el hombre arribó a la plaza junto a otros cuatro jóvenes, tal como contó Marcelo Garrido, papá de la víctima.
“Lo patotearon en la plaza. Lo cagaron a palos, hasta lo podrían haber matado”, expresó el padre sumamente indignado por lo sucedido, tanto por la actitud de ese grupo de jóvenes como de la Policía porque no los detuvo. Si bien no es la primera vez que se pelea con alguien, nunca lo habían atacado de esa forma.
“Como le cuesta hablar, desde chico que los pibes lo cargan y él se enoja, pero yo siempre le digo que no los encare”, detalló el papá.
Al ser consultado sobre si realizó la denuncia policial, Marcelo contó que luego de que su hijo llegara todo ensangrentado a su vivienda, en el barrio Juan Manuel de Rosas, y le contara lo sucedido, de inmediato se dirigieron a la Comisaría Quinta.
“Llegó lleno de sangre a la casa. Volvió solo, porque no perdió el conocimiento. Ahí fuimos a la plaza, pero no quedaba ninguno de los agresores. Así que lo llevé a la comisaría y de ahí al hospital. Pero la Policía no hizo nada, ni siquiera los fue a buscar”, sentenció Garrido, aún enojado por el accionar policial.
El hombre recordó que los efectivos le dijeron que no podían detenerlos sin una orden judicial porque estaban dentro de sus viviendas, dejando claro que los agresores están identificados.
Tras esa respuesta, el padre del herido fue hasta la fiscalía y recurrió a los medios de comunicación para exigir justicia por el violento ataque que sufrió su hijo.
Además, detalló que para “salvarse”, la joven radicó una denuncia en la Policía por acoso. “No digo que mi hijo sea un santo, así él le haya dicho algo a la chica, no tenían por qué pegarle de esa forma”, concluyó el hombre.
Fractura de cráneo y 8 puntos en la frente
Tras la fuerte golpiza, Juan está en reposo en su casa y debe concurrir todos los días al hospital para las curaciones. Como consecuencia de los golpes y patadas, el hombre resultó con una herida cortante en la frente, que requirió ocho puntos de sutura, y una fractura de cráneo, tal como determinó un médico forense que lo examinó luego de que el padre se presentara ante la fiscalía. Además, tiene moretones en los ojos que le dificultan la visión, aunque “él dice que ve bien”, confió el padre.