PUNTA ARENAS: Crudo relato de víctima de ataque sexual de su consuegro con botella de whisky

Los hechos sucedieron en el domicilio del imputado la madrugada del 5 de julio de este año, luego que ambos se encontraban ingiriendo bebidas alcohólicas. (El Pingüino)

 
“Reconozco que soy adicta a la cocaína y estoy siendo tratada en un centro especializado. Esa noche recuerdo que quería seguir bebiendo y ellos iban a ir a comprar más whisky y les pasé dinero, ahí me quedé sola y cuando volvió Edgardo, me dijo que había que pagarle al taxista, a quien yo conocía y empezamos a conversar y veo que mi amiga se fue en su camioneta, por lo que entré a la casa para recoger mi cartera y tomar otro vaso. Cuando entré, le pedí a Edgardo que me sirva una copa, pero lo veo que está muy enojado. Le pregunté por mi plata, porque vi mi billetera sin mi dinero. Me pegó un combo fuerte en el rostro, cayendo al suelo, de ahí me empezó a patear, me traté de parar, pero volvió a pegarme y era un dolor tan fuerte que quedé tirada. Me dijo que iba a pagar todo lo que hizo mi hijo a su hija, y se transformó. Me metió la mano y después sacó una botella de una caja -relató entre lágrimas-. Me colocó la botella y me la dio vuelta, ahí me desmayé. No sé cuánto tiempo duró -se toma unos minutos para respirar-. El dolor era muy agudo y me despertó con una cachetada, (estaba) encima mío, abrió la bolsa de la cocaína y me la tiró en la cara: Me dijo: ‘esto andabas buscando’ y me empezó a ahorcar y ahí logré gritar muy fuerte y gracias a Dios que una señora me escuchó y le dije que me iban a matar y llamó a Carabineros”, declaró ayer la víctima en contra de su agresor, en el primer día de juicio.
Testimonio del imputado
En el juicio, el acusado Edgardo Marcelo Oberti Moreno, también prestó declaración y negó los hechos. “Esa noche recibí un llamado de esta señora (para decirme) que una amiga había sufrido la muerte de un familiar. Me dijo que iban a pasar a mi casa y que llevaría una botella de whisky. Luego, en la casa, conversamos y se terminó el trago, ahí me pasó 15 mil pesos y me dijo que se vaya su amiga. Cuando abro la puerta, me hace gestos para que su amiga se vaya, así que voy a comprar y al volver le digo al taxista que me espere para cancelar el viaje. Cuando me bajo del taxi, la amiga de esta señora (la víctima), me dijo que tenga cuidado porque no andaba con buenas intenciones. Ahí ella (la víctima) se subió al taxi y me entré a mi casa, se fue la amiga de ella. En eso, esta mujer se demoraba y cuando entró me dijo: ‘ahora sí tomamos un traguito’. Nos quedamos conversando y escuchando música, cuando veo la hora le digo que son las 7, así que va a tener que irse. Me dijo que no, que se iba a quedar y me empezó a abrazar y darme besos. Le dije que deje su escándalo y la empujé y cayó, ahí gritó y llegó la dueña de la casa preguntando por qué tanto grito y dijo que iba a llamar a Carabineros, por lo que le dije que los llame. Cuando llegó Carabineros, les dije que había una amiga en la casa que no quería irse y entraron. Fue ahí que me preguntaron por una botella y le dije que la guardé para no tomar más. En eso esta mujer se dirige al carabinero y escucho unos llantos y cuando sale me dicen que me acusaron de violación, por lo que tenía que acompañarlos”.
Hechos
La acusación en contra de Oberti indica que los hechos ocurrieron en circunstancias que la víctima, de 45 años, se encontraba al interior del domicilio del imputado, la madrugada del 5 de julio de este año, ambos bajo los efectos del alcohol. Se señala que el hombre de 48 años habría tenido la intención de tener un acercamiento sexual con la mujer, quien se habría opuesto, lo que motivó que el imputado la agrediera con golpes de puños en el rostro, la empujara al suelo y luego la tomara de los brazos para agredirla sexualmente con una botella de whisky. En medio de los gritos de la víctima, los vecinos solicitaron la concurrencia de Carabineros. La mujer, producto del dolor, tuvo que ser anestesiada para poder tomarle los exámenes correspondientes. A consecuencia de la agresión descrita, la víctima resultó con evidentes lesiones consistentes en contusión en cuero cabelludo, erosiones cervicales, en la muñeca izquierda, dorsales y lesión puntiforme de aproximadamente 4 milímetros en la pared izquierda de la cavidad vaginal, debiendo quedar hospitalizada y sedada, debido al dolor que presentaba al momento de la evaluación médica. Con estos antecedentes, al imputado se le acusó por el delito de abuso sexual calificado con introducción de objetos, por lo cual la Fiscalía solicitó una pena de tres años y un día de presidio, mientras que la parte querellante pidió una pena de cinco años y un día de cárcel.
El juicio continúa hoy con las pruebas restantes de la Fiscalía, querellante y defensa.