PTA. ARENAS: Conductor borracho chocó a otro auto y abandonó a los heridos radicando luego una falsa denuncia de robo de su vehículo

El accidente ocurrió el viernes y una de las víctimas señaló, “estuve consciente en todo momento, lo vi cuando se estacionó un poco más adelante, se bajó, revisó los daños de su camioneta y se fue. Ni siquiera se acercó a ayudarnos. ¡Eso es ser cobarde!”, señaló ayer Carlos Torres Barría, quien junto a su padre, permanece internado en el Hospital Clínico (La Prensa Austral).

 
Por el delito de manejo en estado de ebriedad provocando lesiones graves, menos graves y daños, fue formalizado en el Juzgado de Garantía el transportista Alberto Martinich Torres, quien cerca de las 8,30 horas del viernes no respetó la luz roja del semáforo existente en la esquina de Avenida Bulnes y calle Maipú, impactando la camioneta en la que viajaban Carlos Torres Barría acompañado de su octogenario padre, César Torres Alvarez.
 
Además, la fiscal Alejandra Guevara invocó la agravante de darse a la fuga contemplada en la Ley Emilia, sumado a dificultar la labor policial, ya que el imputado inventó que desconocidos le habían sustraído la Ford F-150 que participó de la colisión, retractándose más tarde en la comisaría, donde aceptó su responsabilidad.
 
“El imputado no sólo no prestó auxilio a las víctimas, sino que además huyó y dificultó las labores investigativas que se le encargaron a la policía, dejando con sus actos a dos personas internadas en el hospital, uno de ellos con una lesión craneal grave”, indicó en audiencia la fiscal Guevara, quien pidió la medida de arraigo regional para el conductor mientras se desarrolle la investigación.
 
El imputado, junto a su abogado defensor, José Miguel Navarrete, no se opusieron a dicha solicitud, por lo que fue decretada por el juez Pablo Miño, quien además fijó un plazo de 90 días para la investigación.
 
Testimonio de las víctimas
 
En la unidad de Cirugía del Hospital Clínico, permanecen internados padre e hijo heridos. César Torres Alvarez recordó el instante del accidente, asegurando que fue en un segundo, que por el rabillo del ojo, vio cómo se acercaba a gran velocidad la camioneta de Martinich, reconociendo que pensó en “lo peor” en ese momento.
 
“Escuché el estruendo que traía el motor de la camioneta, y no se oyó ninguna frenada, el hombre no atinó ni siquiera a esquivarnos”, recordó el pensionado de 83 años, ex mayordomo del Banco Central, quien sufrió múltiples lesiones. Agradeció a Dios haber salvado con vida, pero sobre todo que su hijo, a quien iba a dejar al trabajo, y quien recibió de lleno el impacto del otro vehículo, esté bien y recuperándose.
 
Similar es el pensamiento hacia su padre de parte de Carlos Torres Barría, recordando como “en cámara lenta” el instante del accidente, añadiendo que al ver la camioneta que se aproximaba, sólo atinó a cubrir con su cuerpo a su progenitor.
 
Torres Barría es quien sufrió la más compleja lesión, ya que la contusión craneal provocada por el fuerte impacto le provocó un complejo coágulo de sangre en el cerebro, situación que está siendo monitoreada por el equipo médico del recinto hospitalario, aunque se indicó que es un buen signo que esté consciente y recuerde todo el evento.