NEUQUÉN: Mari Menuco: la inseguridad golpeó a tres lujosas casas
Tres socios del club denunciaron robos y vandalismo a viviendas. Se sospecha de personas de una obra en construcción que hicieron noche sin autorización. (lmneuquen)
La inseguridad ya pasa todo tipo de controles y no contempla fronteras. La villa del lago Mari Menuco, ese lugar exclusivo y privado que se consolidó desde hace más de 40 años sufrió otro robo de casas, en vísperas de la temporada de verano.
La novedad fue informada por la propia comisión directiva del club a los socios, respecto a un hecho que sucedió en la Manzana 15, y donde dos personas se habrían llevado algunos objetos, y ropa, por parte de personas que se encontraban en la villa.
La denuncia está en la Comisaría 49 de Vista Alegre Norte, que tiene jurisdicción en la zona lacustre y por ahora no hay sospechas de que el robo haya sido perpetrado por una “filtración” del límite del club privado, sino por personas que estaban realizando tareas adentro de las casas.
El dato generó otro revuelo dentro del Club de Caza y Pesca Mari Menuco, de debido a las denuncias de filtraciones e inseguridad que viene padeciendo la villa, pese a las inversiones en alambrados, controles y seguridad privada. Incluso ya no se puede acceder al club por la barda, debido al cercamiento de las 60 hectáreas escrituradas.
Según informaron fuentes el robo habría ocurrido el viernes por la madrugada, por parte de personas ligadas a una obra en construcción. Se sabe que habría pernoctado en una vivienda, pese a que las reglas del club son estrictas: los albañiles y las empresas con personal de construcción no puede pasar la noche en la villa turística lacustre y tienen que abandonar el predio después de las 18.
El lago tiene más de 700 socios y funciona como una suerte de comisión de fomento, pero privada, donde se pagan servicios de electricidad, gas, hay una sala de primeros auxilios, policía y vigilancia privada las 24 horas en la barrera de entrada.
También está Prefectura Naval, que vigila las costas y personal que hace rondas de manera permanente en la playa, incluso cuando la villa permanece casi deshabitada, ente los meses de mayo a agosto. Pese a que es un lugar seguro, nadie escapa a este tipo de hechos.