NEUQUÉN: El boxeador Marangel Ademar secuestró durante dos días a su ex y la violó a punta de pistola
Fue en Rincón de los Sauces, lo detuvieron y le dieron un mes de prisión preventiva que este martes la confirmó un tribunal. El boxeador tiene una condena por una brutal golpiza que le dio a Fernanda Pereyra. (lmneuquen)
En la localidad petrolera de Rincón de los Sauces, donde asesinaron a Fernanda Pereyra y luego la convirtieron en una hoguera junto a la criatura que llevaba en sus entrañas, el horror no se resigna a desaparecer y de nuevo una mujer fue víctima de un atroz ataque, con una particularidad: el agresor es la ex pareja de Fernanda, el boxeador Orlando Marangel Ademar, más conocido como Pecho, quien ya tiene en su haber una condena por una terrible golpiza a Fernanda en marzo de 2014.
Este nuevo episodio, que deja expuesto al boxeador, ocurrió el 8 de este mes cuando la joven de 25 años, ya separada de Ademar, acudió a la casa de él porque este la convenció para que se acercara a charlar.
Pese a los intentos del hombre para que volvieran a estar juntos, la joven se negó a retomar la relación por considerarlo un violento. De hecho, cuando ella intentó irse, devino el terror. El boxeador sacó una pistola 9 milímetros dorada, la amenazó de muerte y la obligó a que se quedara en la casa.
Durante dos días, la joven permaneció en cautiverio en la vivienda del boxeador. “No le dio agua ni comida, y si bien no la tuvo atada, estaban las puertas con llave y ella no podía salir. Incluso, el hombre le exhibía las llaves a modo de burla”, contó el fiscal del caso, Pablo Vignaroli.
Durante la reclusión, el boxeador la violó a punta de pistola y hasta la amenazó con un cuchillo de tipo carnicero.
La joven soportó todo tipo de ultrajes con tal de seguir con vida y aguardó el momento para poder escapar.
Y la mañana del domingo 10 la oportunidad surgió. “Ademar había dejado una puerta abierta y, tras una discusión, ella logró sacárselo de encima y salió corriendo por la calle rumbo a la comisaría, mientras el hombre se reía y le arrojaba piedras”, explicó el fiscal.
Con lo puesto, la joven ganó la calle y corrió con toda la intensidad que le permitía el cuerpo. Así fue que ingresó a la Comisaría 35 de Rincón a denunciar a su ex por amenazas.
De la sede policial la trasladaron al hospital. Cuando una médica la atendió, pudo develar los abusos que había padecido.
Dos investigaciones se pusieron en marcha. Primero, el juez de Familia de Rincón ordenó allanar la casa de Ademar, de donde secuestraron dos armas, municiones y cocaína. Luego, a pedido de la fiscalía y en el marco de la causa por privación ilegítima de la libertad y abuso sexual, volvieron a allanar la casa del boxeador.
Personal de Criminalística logró levantar rastros, secuestró sábanas, prendas de vestir de la víctima y del victimario, como así también recuperó la cartera con todas las pertenencias de la joven. Además, en la parrilla de la casa encontraron algunos elementos, incinerados en partes, que el agresor quemó para deshacerse de ellos y que ahora fueron derivados al laboratorio.
Las pericias médicas forenses confirmaron las lesiones por abuso, por lo que el Ministerio Público Fiscal le formuló cargos al boxeador por abuso sexual con acceso carnal y privación ilegítima de la libertad. El hombre quedó detenido con un mes de prisión preventiva. “En unos días más seguramente pidamos la extensión del plazo, a la luz de las nuevas evidencias que hemos ido sumando”, adelantó Vignaroli.
Víctima bajo custodia
En la audiencia de revisión que se realizó este martes al mediodía, la víctima habló ante los jueces y manifestó que si lo dejaban en libertad, ella se tendría que ir de Rincón de los Sauces por temor. Los jueces Gustavo Ravizzoli, Carolina García y Dardo Bordón ratificaron por unanimidad la preventiva del agresor, entendiendo que no solo existe riesgo de entorpecimiento de la investigación sino también para la víctima y su familia, ya que durante el cautiverio los amenazó de muerte.
“Desde la fiscalía se pidió la custodia de la víctima y su familia, además de que se investiguen los vínculos de Ademar para saber qué personas podrían querer llegar a amedrentar a la joven. Tenemos el dato que nos da la Policía de que este hombre es un pesado”, confió Vignaroli.
La defensa del boxeador apeló a la figura del hijo de 5 años que tuvo con Fernanda Pereyra para solicitar la domiciliaria, pero se la denegaron y el niño quedó bajo resguardo de un familiar.