NEUQUÉN: Narco Vip: desde un barrio privado proveían droga a cuatro kioscos del San Lorenzo

Una pareja que reside en el barrio privado Santa Ángela III, de Centenario, proveía droga a una red de cuatro kioscos narco en el barrio San Lorenzo, en el oeste neuquino. Durante dos meses y medio Antinarcóticos de la Policía neuquina investigó los movimientos y ayer desbarataron a la red narco.
Hay cinco personas detenidas a disposición de la Justicia Federal, secuestraron cocaína, marihuana, 230 mil pesos en efectivos, distintos elementos para el fraccionamiento, dos vehículos, un violín y un saxo.
“La investigación se abrió a fines de octubre cuando recibimos una denuncia anónima, a través de la App Neuquén te cuida, sobre un kiosco de droga que funcionaba en el barrio San Lorenzo”, confió el director de Antinarcóticos comisario inspector Eduardo Bravo.
A partir de ahí, se hizo un chequeo para corroborar el dato y luego se solicitó al juez federal Gustavo Villanueva la autorización para llevar adelante la investigación.
“Se hizo un arduo trabajo de investigación en el barrio San Lorenzo, que fue muy complicado porque estos narcos operan con soldaditos que al ver caras que nos son las típicas del lugar dan la alerta para que levanten todo. Por eso nos llevó unos dos meses y medio de trabajo”, explicó Bravo.
Lo cierto es que las pesquisas les permitió determinar que el kiosco trabaja en red con otros tres más. “En cuatro cuadras había cuatro kioscos. El denunciado recibía la droga y la distribuía al resto. Establecido esto, optamos por seguir la ruta de la droga”, aclaró el comisario.
Y la ruta de la droga los llevó al lugar más inesperado, un barrio cerrado de Centenario, Santa Ángela III, a la vera de la Ruta 7.
Allí había decido vivir la pareja de proveedores para no levantar sospechas y porque la seguridad privada que tienen estos barrios no permite que entre nadie sin la autorización de los dueños. Un resguardo adicional nada despreciable para quienes están vinculados al negocio de la droga.
Bravo no da detalles de cómo se investigó a la pareja, por cuestiones de confidencialidad de las tareas de campo, pero afirmó: “tuvimos que usar mucho el ingenio en el caso del barrio privado”.
Las pesquisas entorno a Santa Ángela III, les permitieron determinar que una vez que recibían la droga, en la vivienda la estiraban y fragmentaban para luego entregarla al kiosco cabecera del San Lorenzo para su comercialización.
No se descarta que la pareja haya estado proveyendo droga a otros kioscos, pero todo esto es materia de investigación.
“La pareja eran muy cuidadosa con las entregas. Tomaban muchos recaudos. En el barrio su forma de vida ya había despertado sospechas a los vecinos”, detalló el director de Antinarcóticos.
 
El día D
Con todos los elementos reunidos, el juez federal autorizó a la Dirección de Antinarcóticos a dar el golpe. Fue así que se libraron cinco ordenes de allanamientos, cuatro para el barrio San Lorenzo y una para el barrio privado de Centenario.
Un grupo de más de 50 efectivos de Antinarcóticos Neuquén y Zapala, además de los grupos especiales como la Uespo y la Metropolitana, fueron convocados la madrugada del sábado sin saber a dónde se dirigían.
Había que evitar cualquier tipo de filtración, solo unos pocos jefes policiales sabían que estaban por dar un golpe importante al narco y no se podía fallar.
Los allanamientos arrancaron con la primera luz del sábado, a las 5:30, y fueron en simultáneo.
Al menos en dos kioscos, que eran verdaderos búnker, tuvieron problemas para ingresar con rapidez. “Además de protegerse con soldaditos, tenían medidas de seguridad adicionales para retardar el ingreso como portones y perros bravos, por lo que se tuvo que trabajar con extremo cuidado en eso casos”, detalló el comisario.
En el barrio privado la irrupción de la policía generó mucho revuelo entre los vecinos, que en algunos casos terminaron de aclarar las sospechas que tenían respecto de esta pareja narco.
Secuestros y detenciones
Pasado el mediodía del sábado el procedimiento había concluido de manera exitosa para los investigadores.
La pareja del barrio privado fue detenida, junto a tres personas más de los kioscos del San Lorenzo. Todos quedaron a disposición de la Justicia Federal y en los próximos días se los indagará.
Entre los elementos secuestrados se destacada dos vehículos, 230 mil pesos en efectivo, 260 gramos de cocaína, 50 de marihuana y dos plantas, tres balanzas digitales, elementos de fraccionamiento y dos instrumentos musicales, un violín y un saxo.
–> $550 mil. Es el valor que tiene el kilo de cocaína. Luego se fracciona, estira y se entrega para el narco menudeo.