PTA. ARENAS: Su propia madre entregó a la policía al adolescente que asaltó a un conductor y le robó $200 mil
Luego de que ayer se informara de un asalto “a punta de cuchillo” respecto de una persona que se encontraba al interior de su vehículo, efectivos de la Sección de Investigación Policial (Sip) de Carabineros fueron instruidos por el Ministerio Público para realizar las diligencias tendientes a aclarar el delito logrando dar con su paradero y detenerlo a las 3,55 horas de ayer, pudiendo constatar que el victimario era un adolescente. (La Prensa Austral)
El episodio se desencadenó a las 18,30 horas del jueves en calle Proyectada 1, a la altura del Nº870, cuando un joven de 21 años contaba dinero dentro de su automóvil, momento en que el menor de edad de iniciales S.I.H.C., de 17 años, abrió sorpresivamente la puerta delantera del costado izquierdo, amenazándolo con un objeto punzante en el cuello y manifestándole: “¡pásame las monedas!”.
Lo anterior, derivó en que el afectado le entregara la suma de 200 mil pesos en dinero efectivo. Tras el robo con intimidación, el autor huyó del lugar, alcanzando la persona asaltada a visualizarlo por el espejo retrovisor.
Luego de estampar la denuncia ante Carabineros, el fiscal de turno instruyó al personal de la Sip efectuar las diligencias de rigor para dar con el victimario. Al mismo tiempo, el conductor en conjunto con otras personas realizaron también indagaciones para identificar al hechor, considerando que era conocido por el sector, pudiendo ser reconocido mediante una página de Facebook, y a la postre lograr su aprehensión luego de que su propia madre lo entregara a la policía.
Cabe señalar que no fue posible recuperar ningún peso del dinero sustraído, presumiendo que el menor de edad se lo gastó durante la noche.
Minutos antes del mediodía de este viernes, el joven fue trasladado hasta el Juzgado de Garantía de Punta Arenas, siendo formalizado por el delito de robo con intimidación. Al respecto, la fiscal Katherina Aranís solicitó como medidas cautelares la reclusión parcial nocturna y la sujeción a la vigilancia de la Fundación Esperanza, las que fueron decretadas por la magistrada Paula Stange.
El imputado no mantenía antecedentes delictuales, por lo que recobró su libertad.