NEUQUEN: Manipulaba un arma y mató a su novia de un tiro: investigan si jugaban a la ruleta rusa

En un confuso episodio, una joven de 24 años murió ayer como consecuencia de un disparo en la cabeza en una vivienda ubicada en la calle Moquehue y El Bolsón del barrio Confluencia. Su pareja de 15 años de edad, permanece detenido, mientras se realiza la autopsia y se analizan varias líneas de investigación, entre ellas si jugaban a la ruleta rusa.
 
Según relató del comisario inspector Julio Benavídez, efectivos del Área de Seguridad acudieron ayer pasadas las 20 al domicilio donde la víctima convivía con su pareja y la encontró con un orificio de bala en la zona del parietal hacía la nuca y el arma a un costado.
 
El cuerpo fue hallado en la cocina y cuando “se entrevista a la pareja dijo que en ocasión de estar manipulando el arma se le había escapado un tiro que impactó en el cráneo de la joven”, agregó el comisario.
Benavídez sostuvo que la pareja convivía en la casa de familiares del joven desde hace un año y que con ellos vivía una nena de cinco años, hija de la chica fallecida. El menor quedó detenido y se le realizará la prueba del rodizonato de sodio para determinar quien efectuó el disparo.
“La víctima se llama Jesica Fernández y la nena quedó con el padre biológico quien se presentó en el lugar”, añadió.
El comisario dijo que hoy se le realizará la autopsia y que en la causa también interviene Delitos Juveniles, dado que la pareja “es un joven que tiene 15 años, que cuenta con algunos ilícitos en su haber”.
Benavídez señaló que el arma, un revólver calibre 38, fue remitida al área de criminalística y que se desconoce su procedencia. “Había un solo cartucho y el proyectil era el que estaba en el cráneo de la víctima. Eso nos llamó la atención, la existencia de un solo cartucho”.
Al tiempo que agregó que el sospechoso habló de manipulación del arma y que “no hizo referencia de que estuvieran jugando a la ruleta rusa”. El joven detenido es inimputable por ser menor de 16 años.
Además el comisario indicó que se descarta la intervención de una tercera persona porque “cuando la policía llega estaba la puerta cerrada, hubo que forzarla, y el joven pide auxilio y la asistencia de una ambulancia”.