NEUQUÉN: Una mujer quiso vender una caminadora por Facebook y la estafaron en $16 millones

El hecho ocurrió días atrás. A la víctima le generaron préstamos, le sacaron el dinero y también se metieron en la cuenta de una colega suya. (lmneuquen)

Una neuquina que se volcó a las redes para querer vender una cinta caminadora se encuentra ahora envuelta en trámites, reclamos y denuncias, luego de caer víctima de un estafador que le generó préstamos y le vació su cuenta y la de una colega, dejándole así una deuda de unos 16 millones de pesos. El banco donde tiene su cuenta, Santander, no quiere reconocer el delito y cancelar la deuda.

Cecilia, la víctima de esta nueva enorme estafa, contó que todo ocurrió días atrás, cuando puso a la venta por Marketplace de Facebook una cinta caminadora que ya no necesitaba a un valor de 750 mil pesos. Los interesados no tardaron en llegar y uno particularmente, pareció muy decidido a avanzar con la transacción.

“Me contacta una persona que me dice ‘tengo 650 mil en mano, te puedo mandar 90 mil para señar‘”, contó Cecilia. Esto la convenció también de que el hombre iba en serio y le mandó sus datos bancarios para recibir el dinero.

A pesar de lo que manifestó, el hombre pronto la volvió a contactar y le mandó un comprobante de transferencia apócrifo, asegurando que “por error” le había transferido 900 mil, un monto mucho mayor siquiera al acordado para la venta.

Cecilia se sorprendió, pero lo cierto es que, según cuenta, el hombre se mostró desesperado, indicó que andaba con muchas cosas porque tenía a su esposa internada y le suplicó la devolución del dinero. La víctima le aseguró que no se quedaría con un centavo.

Aquí entró en escena un supuesto empleado del Banco Santander, quien se comunicó con ella para solucionar el error de transferencia. “Le dije que podía transferirle yo de vuelta el dinero y listo, pero él me dijo que no porque había que seguir un procedimiento”, relató.

Así logró engañarla, hacer que ella entregue un código clave que le llegó por mensaje a su celular para ingresar a su cuenta y, una vez dentro, el estafador generó dos préstamos por 2 millones de pesos y otro por 900 mil, tras lo cual, comenzó a transferir el dinero a distintas cuentas. .

La mujer confió a ciegas en quien pensó era un empleado del banco donde tiene sus cuentas, quien utilizando jerga bancaria y mentiras rebuscadas que no hicieron más que marearla, logró tomar todo el dinero y también unos 4 mil dólares.

En simultáneo, el comprador de la caminadora seguía mandándole mensajes desesperados a la mujer rogando por el dinero.

El estafador, aprovechando la confianza que logró, también convenció a Cecilia para sumar la cuenta de una colega en las operaciones, que lamentablemente en su afan por ayudar, otorgó también el acceso al estafador, quien le sacó casi 3 millones de pesos de su cuenta y le generó también dos préstamos por otros 2,5 millones.

En medio de toda esta maniobra, el embaucador les aseguró que pasadas la medianoche verían todo normalizado y el dinero que les correspondía en sus cuentas. Aunque, como es de esperarse, eso nunca ocurrió.

La denuncia en el banco y en Delitos Económicos

Cecilia y su compañera se acercaron al día siguiente mismo, ya lamentablemente conscientes de lo ocurrido, en la sucursal del Santander, donde les recepcionaron las denuncias, las tranquilizaron y las mandaron a hacer la denuncia a la Policía.

En Delitos Económicos, contó Cecilia, los efectivos le comentaron que “reciben denuncias de este tipo todos los días”. Y es que a pesar del fuerte trabajo de concientización y difusión que se ha intentado implementar desde la pandemia, cuando las estafas virtuales tuvieron un importante incremento, aun los estafadores logran hacer de las suyas.

A pocos días de presentado el reclamo, la entidad bancaria ya emitió una respuesta, aunque no era la que la víctima esperaba.

“Estuvimos analizando tu caso y notamos que las transacciones que desconociste se realizaron según tu operatoria habitual”, se observa que comunicaron en un mail que recibió Cecilia.

“Presenté los números, números de cuenta, tengo los chats, audios, todo. Y el Santander dice que no hubo nada extraño, es insólito. No pude haber hecho todas esas transferencias y créditos en tan poco tiempo”, expresó la mujer, indignada con la respuesta y a su vez sumamente preocupada, ya que se trata de unos 16 millones de pesos los que perdió teniendo en cuenta el perjuicio sufrido en su cuenta (y los créditos que hoy adeuda) y la de su colega, a quien deberá además devolverle el dinero de su bolsillo.

De forma burlona, el estafador incluso volvió a contactarla para regocijarse en el daño hecho dos días más tarde, tras notar que ya no tenía acceso a la cuenta. “Se ve que solucionaste los problemas solita. Buena semana”, le escribió.

Las mujeres ya presentaron también una nota ante el BCRA y consiguieron asistencia letrada de abogados que están en la materia, decididas a recuperar lo que es suyo e impulsar medidas de mayor seguridad para evitar estas estafas que son, lamentablemente, tan habituales.