PTA. ARENAS: A la cárcel sujeto que entregó cocaína, alcohol y dinero a adolescente para atacarla sexualmente
El hombre, de 60 años, fue formalizado ayer por obtención de servicios sexuales de menores de edad, además de almacenamiento y producción de material pornográfico infantil. Se acordaron 70 días para el cierre de la investigación. (El Pinguino)
En el Juzgado de Garantía de Punta Arenas se formalizó ayer a un hombre de 60 años por los delitos de obtención de servicios sexuales de menores de edad, además de almacenamiento y producción de material pornográfico infantil. La víctima es una adolescente de 15 años.
El sujeto fue enviado a la cárcel y se acordaron 70 días para el cierre de la investigación.
Pero, ¿por qué hay un fallo del sistema y la sociedad? La víctima desde los 13 años ha sufrido distintos casos de explotación sexual, también tiene un consumo problemático de alcohol y drogas, por lo mismo, se considera que sus derechos han sido vulnerados y es parte de los programas que lleva a cabo Mejor Niñez en la Región de Magallanes.
Hace algunos meses, el Tribunal ordenó a Mejor Niñez que traslade a la adolescente a Santiago para que sea tratada por sus adicciones, sin embargo, la institución nunca acató la orden, obligando al Programa “Mi Abogado” a presentar una querella por desacato, siendo esto, lo último indagado por este medio.
El caso
La formalización en contra del imputado, de iniciales J.C.A.B, fue realizada por el fiscal jefe de Punta Arenas, Fernando Dobson, precisando que los hechos se remontan al 25 de octubre del año pasado, cuando la víctima sale de su domicilio buscando que alguien la lleve al centro de la ciudad. Fue entonces cuando fue contactada por el imputado, quien la invitó a su domicilio, proporcionándole alcohol y cocaína, a cambio de efectuarle tocamientos de significación sexual y posteriormente mantener relaciones sexuales.
De igual forma, el persecutor informó que tras periciar el teléfono celular del imputado se encontró tres imágenes de la menor de edad desnuda. Se explicó que el trabajo policial arrojó que las fotografías habían sido tomadas por la cámara del celular referido y que estaban almacenadas en este mismo. Es por esto que se le imputa el delito de almacenamiento y producción de material pornográfico infantil.
El fiscal explicó que la abuela de la víctima, transcurrido un tiempo prolongado de no tener información de la adolescente, interpuso una denuncia por presunta desgracia, sin embargo, la joven volvió a su hogar al día siguiente, es decir el 26 de octubre.
El testimonio de la abuela precisa que la joven regresa en pésimas condiciones higiénicas, sin ropa interior y con claros indicios de haber consumido alcohol y drogas. Este relato es coincidente con lo que dice la profesional de la ONG Raíces, institución que concretó la denuncia del hecho.
La trabajadora social expresó, según la víctima, efectivamente tuvo relaciones sexuales con J.C.A.B a cambio de drogas y alcohol, al día siguiente (26 de octubre), se queda en el domicilio del imputado (la joven le dice a dos personas que fue encerrada), ya que éste le iba a comprar un celular debido a que era parte de su “trato”, lo cual no hace, dejando que la joven se retire posteriormente.
Cabe hacer presente que la menor, antes de salir de su vivienda el 25 de octubre, había estado 50 días internada en la Unidad de Siquiatría del Hospital Clínico donde se entregó un diagnóstico de ciertas condiciones mentales que padecía, al igual que la dependencia de drogas. El profesional recomendó evitar el acceso de la joven a teléfonos celulares, ya que utilizaba las redes sociales para adquirir drogas o contactar personas para entablar acuerdos de significación sexual, para obtener las sustancias ilícitas.
Es precisamente este medio el que ambos utilizan para contactarse posteriormente, haciendo uso de Instagram, en donde los policías encontraron mensajes incriminatorios contra el imputado.
Lo anterior, hizo que los encuentros entre ambos ocurrieran en más de una oportunidad, donde en una ocasión el imputado le ofreció dinero, manteniendo además la promesa de comprarle un celular, todo a cambio de relaciones sexuales.
El fiscal Fernando Dobson explicó que el proporcionar alcohol y drogas, podría ser considerado como un agravante, sin embargo, los delitos formalizados consideran por el momento penas de entre 3 a 5 años de cárcel.
La Fiscalía no descarta la imputación de nuevos delitos.