NEUQUÉN: Crimen en un inquilinato: lo mató de ocho puñaladas

El asesino, que había tomado alcohol con la víctima, fue acusado. (lmneuquen)

En medio de una reunión en la que habían ingerido bebidas alcohólicas, el dueño de un inquilinato de barrio Belgrano atacó a puñaladas a Mauricio Alejandro Tecker, de 39 años, quien intentó pedir ayuda pero cayó tendido en plena calle y murió. Su asesino escapó de la escena, pero regresó antes de lo previsto y se topó con la Policía, que trabajaba en el lugar. Eugenio Sanhueza fue detenido y más tarde acusado de homicidio simple.
 
El hecho ocurrió el miércoles 18 de septiembre, alrededor de las 21, en un inquilinato de Copahue 465, donde la víctima alquilaba una pieza. Esa noche se había reunido con Sanhueza (44), el propietario del lugar, quien también vivía allí, y tras ingerir varias bebidas alcohólicas comenzaron a discutir.
 
En determinado momento, el acusado tomó un cuchillo y atacó a Tecker. La víctima intentó escapar corriendo, pero cayó desplomada en plena calle, donde murió. Algunos vecinos alcanzaron a ver al atacante huir y solicitaron la presencia de una ambulancia y de personal policial en el lugar.
“Policía tomó conocimiento a las 21:10 del miércoles sobre una persona que estaba tendida en la vía pública en calle Copahue. En ese momento tenía aún signos vitales muy leves por lo que se dio intervención al SIEN, pero cuando llegaron se constató que había fallecido”, explicó el comisario Julio Arrain a LM Neuquén y aclaró que el dueño del inquilinato le había cedido a la víctima una pieza a cambio de algunos trabajos de mantenimiento.
En el lugar trabajó personal de Seguridad Personal que entrevistó a vecinos y relevó cámaras de seguridad; de Criminalística, quienes trabajaron sobre la escena del crimen, y también se acercó la fiscal de Homicidios, Sandra Ruixo.
Cuando aún trabajaban en el lugar, a las 00:15 del jueves, Sanhueza regresó a su casa, pero se encontró con los policías, quienes, al identificarlo, lo detuvieron por orden de la fiscalía.
Ayer a la tarde, la jueza Ana Malvido avaló la acusación de homicidio simple y le dictó seis meses de prisión domiciliaria con prohibición de contacto con los testigos que señaló la fiscalía, que tendrá un plazo de cuatro meses para concluir la investigación.
Se supo en la audiencia que se logró secuestrar la presunta arma homicida, que deberá ser peritada para establecer si tiene muestras de sangre de la víctima.