PTA. ARENAS: Se fugó imputado que enfrentaba juicio por abusar de menor
El primer día, el acusado de un delito de abuso sexual a una niña negó los hechos. Sin embargo, la víctima declaró recordando los episodios cometidos por la antigua pareja de su madre, ante lo cual la Fiscalía pide una pena de 6 años de presidio.(El Pinguino)
A pesar que la defensa de un imputado llevado a juicio por un delito de abuso sexual buscaba su absolución, incluso negando él mismo los hechos en audiencia, ayer sin motivo ni justificación desapareció y no se presentó en el tribunal.
Ante esta situación, los jueces Guillermo Cádiz, Julio Álvarez y Pablo Miño, decidieron decretar una orden de detención para el imputado de iniciales C.A.A.V. quien no contestó el requerimiento judicial que se realizó durante la mañana de ayer, al no comparecer ante la justicia y al juicio que se realiza en su contra, por lo que se entregó la orden de búsqueda a las policías para llevarlo nuevamente al centro de justicia. De lo contrario se arriesga anular el procedimiento.
Cabe recordar que el imputado fue llevado a juicio por la acusación que señala que en el transcurso de los años 2008 a 2010 en circunstancias que la menor víctima de desde los 5 años permanecía junto al imputado Christian Alvarado Vásquez, pareja de la madre de la menor en aquella época, al interior del inmueble que compartían, éste último aprovechándose el hecho de encontrarse a solas con la menor mientras la madre trabajaba, procedió a efectuarle tocaciones de significación sexual.
Con estos antecedentes, la Fiscalía está solicitando una pena de 6 años de presidio.
En el primer día de juicio alcanzó a declarar la niña de actuales 14 años, quien señaló tras un biombo que “en conversación con mi doctor le conté lo sucedido con una ex pareja de mi mamá y el doctor le contó a mi mamá y ahí se hizo la denuncia. Nadie lo sabía, ahí le conté que cuando yo tenía como 6 años su pareja me hacía tocaciones y después empezó con sus partes íntimas a rozarme por atrás. Él me decía que no debía decírselo a nadie, que era un juego y que si le decía a alguien me iba a pegar. Eso pasó cuando vivíamos en una casa antigua, y eso pasaba cuando mi mamá iba a trabajar y me quedaba sola con él. Eso pasó muchas veces”.