PUNTA ARENAS: Mujer rompe el silencio después de 20 años: denunció reiterados abusos de profesor de música

Los hechos habrían ocurrido entre los años 1991 y 1992, donde asegura que cuando se equivocaba la amenazaba y le realizaba tocaciones en sus partes íntimas.(El Pingüino)

 
 
Con el claro objetivo que más víctimas de los ataques sexuales que habría cometido un profesor de música a sus alumnas hablen, una mujer de actuales 35 años y radicada en Buenos Aires, Argentina, decidió viajar a Punta Arenas para denunciar lo que cayó por más de veinte años.
La joven madre decidió dar un paso importante en su vida para reparar los daños que le provocaron los abusos cuando niña. “Cuando volví a retomar los estudios musicales, fueron emergiendo los eventos traumáticos vividos en la niñez, debí buscar ayuda de un especialista y con terapia sicológica y hace un año atrás los recuerdos fueron más violentos y denunciar es parte del proceso de sanación que una requiere para hacer justicia social y sicológica. Hay un proceso en Fiscalía, hace un par de días, pero más allá de eso me importa que salgan más testimonios de víctimas que han pasado situaciones similares con esta persona, porque no son situaciones aisladas. Lo que me interesa y busco es que esta persona a la edad que tiene, más de 80 años, no se muera impune”.
La joven compositora agregó que sabe que la justicia a esta altura no va a hacer nada. “Por la edad que tiene es una persona inimputable, no obstante ello, nosotros estamos apelando a que este caso no prescriba, pero espero que la sociedad haga un repudio a estas personas que son admiradss y considerados autoridades. Esto ocurrió entre los años 91 y 92 cuando yo tenía entre 9 y 10 años”.
Entre los recuerdos que han atormentado a la magallánica radicada en Argentina, están lo que ella califica como “tortura bajo la premisa del error. Si me equivocaba en la partitura, me decía que iba abusar, y eso hacía, me tocaba por arriba y debajo de la ropa, me colocaba los dedos en la boca, se apoyaba en mí. No vi que lo haya hecho con otras personas, sólo puedo hablar desde mi perspectiva, y eso intento con esta denuncia, hablar también es hacer justicia, llamar a las víctimas infantiles que lo denuncien. De todo esto no lo comenté, porque es algo muy vergonzoso, esto no es algo que estoy inventando, porque existe un pacto de silencio entre el abusador y la víctima, porque nadie te va a creer, van a decir que estás loca, además la familia magallánica y en ese tiempo no se hablaba, no hay espacio para este tipo de denuncias, no hay contención emocional y social”.
La mujer de 35 años, de iniciales N.A., señaló que a pesar de dedicarse a la música ha intentado dejarla. “Ahora soy músico, y siempre quiero dejar la música, pero la música no me deja. Ahora vine a Punta Arenas exclusivamente a interponer la denuncia a la Fiscalía y estoy siendo asesorada por la Fundación para la Confianza, que es la gente que denunció a Karadima y ahora siento un gran alivio, por muchos años tuve mucha vergüenza, pero en algún momento hay que hacer la denuncia. Espero que se le hagan los espacios a los niños para que hablen con honestidad. Este es un delito muy antiguo y esperamos que no prescriba porque la Fiscalía se declararía incompetente”.
Cabe señalar que la joven que actualmente se dedica a la música y a la gestión cultural, a través de Facebook comenzó a viralizar la denuncia donde publica que “fui abusada sexualmente por el maestro de violín en las clases del Conservatorio Regional de la Universidad de Magallanes, ubicado en la ciudad de Punta Arenas, Chile. Su nombre es D.M. (nota de redacción: sólo iniciales por no ser una persona formalizada ante la justicia) y según sé, está domiciliado en alguna parte o cerca de la ciudad de Puerto Natales, Región de Magallanes, Chile. Durante muchos años este hombre fue director de dicha institución. D.M. un hombre de en ese entonces 55 años aproximadamente que estaba a cargo del cuidado de todas las niñas (como director de dicha institución), dirigía la orquesta de niñas del conservatorio y además, daba clases a niñas de violín, viola y violonchelo. Este hombre que era “admirable” en su calidad de docente, ocupaba su lugar de poder para torturarme y humillarme sexualmente”.