RIO GALLEGOS: “Sólo quiero saber qué le pasó a mi hijo la noche que murió”

 
Ana Villalonco, madre de Gastón -de 50 años- quien el pasado 24 de marzo fue encontrado en un zanjón en horas de la madrugada. Busca dar con un vecino del sector quien habría llamado a la policía cuando lo escuchó quejarse.
 
Ana comenzó su relato asegurando que lo que más desea en estos momentos, es que saber qué le pasó a su hijo, quiere dialogar con el hombre que lo encontró para saber si Gastón le dijo algo y si preguntó por ella.   
 
Según sus palabras, ella cuando sucedió la muerte del hijo estaba de viaje en el vecino país de Chile y su hijo se encontraba en un hogar sustituto ubicado sobre la avenida Balbín y Zapiola, debido a que ella tenía miedo que Gastón llevara a sus amigos indigentes a beber a la casa. Por problemas de salud debió quedarse más tiempo en Punta Arenas y retrasar su regreso a nuestra ciudad capital.
 
“Lo que más anhelo en esos momentos es saber qué pasó con mi hijo, quién lo encontró en ese pozo, dicen que fue un hombre, que lo escuchó y lo vio”, comentó llorando la mujer y agregó: “No hizo nada por su cuenta, fue y llamó a la policía y cuando llegó lo sacaron de ahí, estaba con vida y tenía signos vitales”.
 
A su vez continuó contando que posteriormente lo trasladaron a la comisaría, según le explicaron a la ex mujer de Gastón.
 
Ana además comentó: “Ayer, cuando me descompuse, me llevaron al hospital y le pregunté al médico de guardia y me dijo que sí conocían a mi hijo porque siempre lo traían acá (por el Hospital Regional)”, y añadió: “Pero nadie me dijo qué pasó en el último momento, si dijo algo, o si preguntó por mí”. En otro momento de la entrevista reiteró: “Quiero saber qué le pasó, quién lo golpeó, porque veo signos de golpes, porque para mí le han dado una tremenda golpiza”, y añadió: “Porque tiene la cabeza muy hinchada y no me lo dejaron vestir, yo le llevé la ropa pero no me dejaron vestirlo, por lo que me dijeron fue por la autopsia, que se le había molido el cuerpo”.
 
Con lágrimas en los ojos Ana aseguró: “No me dejaron tocarle su cuerpito, sus manitos, no me dejaron nada, mi hijo no era malo con nadie, lo único malo es que tomaba y no me hacía caso porque no dejaba de tomar”.
 
 
 
No era un tipo peleador
 
La mujer, al ser consultada si había hablado con alguno de los amigos de Gastón para saber lo que había sucedido, comentó que no los ha visto y que no los quiere ver porque no los quería, debido a que -según su relato- sólo buscaban a Gastón para ir a tomar.
 
“Lo que quisiera saber es quién golpeó a mi hijo, en manos de quién cayó, él no le hacía mal a nadie”, aseguró y añadió: “El habría andado caminando por ahí, buscando su pensión tal vez, pero daño no pudo andar haciendo porque andaba muy tomado, de tal manera que no pudo salir de ese pozo, ya que estuvo toda la noche rasguñando para salir y no pudo”.
 
Más adelante aseguró que nadie le quiere contar lo sucedido y que ella carece de dinero para poner un abogado para que la ayude a saber la verdad.
 
“Quiero saber cuánto le quedaba de vida, si dijo algo, si alguien le pegó, qué le hicieron, no he podido sacar nada en limpio de eso”, reiteró y agregó: “El no murió porque se cayó a ese pozo nomás, estoy convencida que lo largaron ahí y por eso se golpeó tanto la cabeza y él no era tipo de una cabeza grande, era de cabeza normal”, estaba muy hinchado, demasiado hinchado.
 
 
 
Pedido desesperado
 
Por último realizó un pedido desesperado y se dirigió al hombre que encontró a Gastón esa noche en el zanjón. “Quiero ver al hombre que lo encontró para saber cómo fue, a qué hora lo encontró, si él le habló, si es que pudo porque capaz que ya estaba medio moribundo”, sentenció: “Lo que me importa es saber qué es lo que pasó, Gastón no era tipo peleador, no era un tipo que andaba buscando pelea ni tampoco le daba el cuerpo para andar en ese momento buscando motivos para molestar  a otro, a él algo le hicieron”.
 
Mientras que a su vez reiteró: “Lo que quiero es que alguien haga un poco de justicia por la muerte de mi hijo, que me aclaren cómo fue, con eso me conformo porque ya no puedo hacer más nada”, y agregó: “Lo que sí quiero es que ese hombre que lo encontró se acerque a hablar conmigo, para saber si le dijo algo”, concluyó Ana, quien además dejó sus números de teléfonos para que el hombre se comunique con ella y puedan hablar, su número fijo es 439494 y su celular es 15418276.